En el puerto de Dublín, la policía investiga el terrible descubrimiento de 23 inmigrantes ilegales del este de Europa dentro de un contenedor de carga. Un ladrón de coches encuentra una laptop que contiene datos peligrosos, y Terry Corcoran, un periodista desacreditado, conoce a una mujer que busca a su hermana y que cree que ha sido vendida para el tráfico sexual en Irlanda.

Nina descubre una estafa de tarjetas de crédito en el club nocturno donde sospecha que su hermana está retenida. Lleva evidencia a la policía pero, al no tener éxito, decide tomar cartas en el asunto. Mientras tanto, Terry reúne información sobre el contador Frank Erskine para un artículo periodístico, pero empieza a sospechar de su aparente suicidio.

Cuando Terry le pide a su cuñado, un consultor financiero, que analice los datos del disco que robó del apartamento de Erskine, se da cuenta que estos apuntan a una conspiración de lavado de dinero y a violaciones de la financiación de campañas. Frustrada por la inacción de las autoridades y por los trámites burocráticos, Nina toma un paso peligroso en busca de justicia para su hermana.

Terry está furioso porque su denuncia en contra de Carrick ha sido anulada debido a interferencia policíaca, y confronta a Maureen en la sede de la campaña. Como tiene sospechas, Maureen se propone llegar a la verdad de las afirmaciones de Terry, y la policía por fin se acerca a los traficantes con la ayuda de Nina.

Tras la muerte de un científico bajo circunstancias sospechosas, el periodista Terry Corcoran comienza a investigar a Chemacran, la compañía farmacéutica donde trabajaba el fallecido. Chemacran se encuentra en medio de una lucrativa fusión gracias al éxito de su antidepresivo Seraban. Mientras tanto, la reportera Maureen Boland intenta conseguir información sobre J.P. O'Farrell, el direc...

Horrorizado por el bombardeo, Terry se decide a escribir un artículo sobre la intimidación racial para ayudar en el caso de Jake. Maureen busca los trapos sucios de la fusión para la entrevista con O'Farrell, mientras que Terry y Cora van a la casa de Plunkett y descubren su cadáver, y ahora están convencidos de que ambos científicos fueron asesinados por lo que sabían sobre Chemacran.