Después de un invierno tranquilo, los cazadores de serpientes, Simon y Nadine Keys están desesperados por conseguir trabajo. Es un mal comienzo para la temporada de serpiente, pues Simon es atacado por una cobra y lucha contra una enorme mamba negra.

En la ciudad de Durban (Sudáfrica), el equipo de trabajo formado por Simon y Nadine, un matrimonio, responde a llamadas desesperadas de vecinos que se encuentran con serpientes venenosas.

Un padre está desesperado al ver una mortal mamba negra en su patio, y el equipo se apresura en ir a la escena antes que los hijos del hombre regresen de la escuela.

Siouxsie tendrá que vigilar a Simon, una tarea con mucha carga emocional para ella. Tras llegar a casa, Simon ve un cobra en el jardín, pero se les escapa. El teléfono suena y el aviso es claro y terrible: se trata de una mamba.

Un grupo de vecinos está aterrorizado porque una serpiente de gran tamaño merodea por la aldea, comiéndose al ganado. Sólo hay una serpiente en esa zona capaz de atacar a mamíferos grandes, la pitón africana.

Simon y Siouxsie van de un lado a otro de la ciudad atendiendo llamadas de socorro, ya que un montón de serpientes se han metido donde no debían. Los clientes son de todo tipo, desde multimillonarios a familias pobres de zonas rurales.