Waiting for God

El chico nuevo, Tom, genera un gran impacto en el personal y en los huéspedes cuando decide ir a huelga de hambre hasta que mejore la comida.

Tom va a leer el mapa cuando Diana maneja el Porsche de su sobrina a Brighton.

Diana trata de animar a Tom, quien ha tenido un ataque al corazón y se encuentra postrado, obsesionado con la idea de la muerte.

Tom desarrolla un nefasto plan para chantajear la gestión de Bayview. Tom y Diana interrumpen el bautismo de su sobrino nieto.

Los residentes intentan evitar que Greta le arrebate a Jane el puesto de matrona del hogar cuando esta última dice que ha visto la luz y ha decidido convertirse en monja.

Bains intenta tener el poder legal sobre Tom y Diana al presentarlos como mentalmente inestables, pero un psiquiatra declara que Tom y Diana tienen sus facultades mentales en perfecto estado, a pesar de su escandaloso comportamiento.