Mika aún no ha encontrado lo que anda buscando en la vida. Decide marcharse de Caballerizas Kaltenbach y llevarse a su semental Vendaval a Andalucía en el sur de España. Su destino es la legendaria Ora, que aparece en sus sueños y es el lugar de origen de Vendaval: un lugar donde los caballos pueden ser realmente libres, salvajes y felices. En una solitaria finca en medio de ninguna parte, Mika conoce a la desenvuelta Sam. Ella ayuda a su padre Pedro a mantener en marcha la granja... a su manera. Pedro lleva mucho tiempo en una agria disputa con su hermana Tara, que no está de acuerdo en que se encierre a los caballos y se los meta en cubículos. Ella prefiere que disfruten la misma libertad que ella disfruta. Mika queda impresionada con Tara, que parece entender a los caballos aún mejor que ella. Cuando la ciudad amenaza con arrasar la naturaleza intacta y con ella la más importante fuente de agua en el hábitat de los caballos salvajes, a Mika se le ocurre una idea brillante. Pretende revivir una antigua raza de caballos salvajes para salvar el legendario oasis de Ora. El tiempo se agota, pero a Mika y Vendaval aún les espera el desafío más grande...