Siempre contigo
Wanda no puede más: su hija lleva ocho meses embarazada y quiere celebrar una boda que su exmarido no tiene intención de pagar. Su madre piensa que se está muriendo y su hijo va a acabar en rehabilitación o en el ejército. Su novio de hace tiempo no le apasiona, pero su nueva novia tampoco, y apenas tiene tiempo para sí misma. Aunque tampoco sabría qué hacer con él.
