empujar a Ruby (Cobie Smulders) y a su marido Peter (Vincent Piazza) al divorcio, Annie (Melanie Lynskey) y su prometido Matt (Jason Ritter) han reunido a la familia y amigos para abordar el fracaso de su matrimonio. La hermana de Ruby, Jessie (Clea DuVall), su novia Sarah (Natasha Lyonne), su viejo amigo Jack (Ben Schwartz) y su ex novia Lola (Alia Shawkat) participan en varios juegos para intentar hacer del fin de semana algo divertido. Cuando todo sale mal, los espacios reducidos sacan a relucir los trapos sucios. Las parejas empiezan a tambalearse por estas revelaciones y se ayudan entre ellos de manera inesperada, esforzándose por expresar su devoción y admitiendo que todo no puede ser perfecto. Se crean nuevos vínculos y se curan las viejas heridas mientras todos ven lo que ocurre cuando las buenas intenciones surgen de la manera más torpe.