Los Grayson vuelven a estar en el candelero, en medio de una tormenta mediática, mientras el pasado de Emily sigue persiguiéndola. Mientras, el nuevo negocio que Declan ha montado con Trey le mete en apuros. Amanda Clarke tiene que mentir a Jack para ayudar a Emily con su venganza. Emily encuentra pruebas de que el hombre del pelo blanco conocía íntimamente a su madre.
Jugar con los Grayson desde luego es jugar con fuego, y Amanda lo aprende por las malas. Mientras, Aiden y Emily se engañan uno a otro; Daniel empieza a encargarse de algunas cosas él solo. Conrad se reúne con un miembro de la Iniciativa. Padma da una triste noticia a Nolan. Y Jack encuentra un obstáculo para arreglar el bar.
Tras los sucesos del verano pasado en Los Hamptons, y con más cosas en juego aún, ¿cuál será el siguiente paso de Emily? ¿Podrá controlar su corazón y sus emociones, evitando que se interpongan en su decisión de vengar a su padre?
Las cosas se complican cuando Emily sigue tejiendo delicadamente la trama para volver a la vida de los Grayson, mientras continúa con su relación con Amanda y su hijo nonato. Declan recibe una extraña aunque lucrativa oferta de un compañero de clase. Daniel rescata a Charlotte de la clínica. El plan de fuga de Victoria se frustra. Y Jack y Amanda se hacen un test de paternidad.
Rostros del pasado resurgen en Los Hamptons, lo que para Victoria y Emily implica distintos problemas y significa distintas cosas. Mientras, el sentido del deber de Jack crece exponencialmente, y Padma hace algo que podría tener grandes repercusiones para NolCorp.