Jake Weber

Sherlock y Joan investigan un asesinato en un hotel de lujo de Manhattan.

Un consejero matrimonial se desploma durante una presentación. El minucioso examen del equipo revela cambios de conducta que contradicen su motivador discurso acerca de los roles de mujeres y hombres.

Benson investiga las denuncias vertidas contra un popular locutor de radio.

Informan a Carrie de que Sekou conducía la furgoneta que explotó en Manhattan y que dejó dos personas muertas y docenas de heridos. La ciudad entra en modo de crisis y se llevan a Keane a una ubicación secreta. Mientras tanto, la prensa invade la casa de Carrie después de hacerse público que formaba parte del equipo de defensores de Sekou. Quinn protege a Franny, a quien han dejado a su cuidado.

Con Quinn confinado durante 72 horas en Bellevue, Carrie trata de resolver el misterio del hombre que ha estado vigilando su casa desde el otro lado de la calle. Gracias a las fotos de Quinn, sabe que también visitó el trabajo de Sekou y que tenía acceso a la furgoneta que explotó. Pide ayuda a Conlin, que se da cuenta rápidamente de que algo no encaja.

Debido a un doble engaño, Saul tiene una última oportunidad de convencer a Keane de que Javadi y Dar están falseando información. Con la esperanza de recuperar la custodia de Franny, Carrie se reúne con un psiquiatra judicial. Max informa a Carrie de sus hallazgos sobre la empresa que visitó Conlin el día que lo mataron y envía su currículum para conseguir trabajo allí y recabar más información.