La vida parece prometedora en el Jardín Encantado: Florence y Brian están ocupados admirando las flores, Dylan está tomando su siesta de media mañana y Gertrudis disfruta su desayuno. Sólo hay un problemita. De hecho es un problema apestoso del tamaño de Dougal. Florence decide que ya es suficiente y anuncia que llegó el momento de que Dougal tome un baño.

Hay algo muy extraño pasando en el Jardín Encantado, pero Dougal no parece saber qué pueda ser. eso es, hasta que nota algo demasiado particular: todos sus amigos parecen estar afectados por una fuerza misteriosa que los hace ir en reversa. Y ahora no son sólo los únicos; hasta las flores disminuyen su tamaño.

Dougal está aburrido. Muy aburrido. Dylan intenta entretenerlo con una canción, pero no está muy impresionado. Gertrudis sugiere una taza de té, pero Dougal aún no está convencido. Hasta la idea de Florence de un lugar en el jardín se encuentra con una fría recepción.

Zibidi tiene un anuncio: está organizando el primer Gran Reto de Carrera y que le gustaría darle al ganador un trofeo espectacular. Todo el mundo está impresionado y en poco tiempo, Dougal , Dylan, Brian y Gertrudis han empezado a entrenar para el gran evento , convencidos de que su destino es el éxito.

Es el Día del Conejo y Dylan está a la espera de la visita del Gran Conejo que viene a que le dé muchos regalos. Zibidi dice que todo lo que necesita hacer es permanecer despierto. Como era de esperarse, esto es un poco difícil para Dylan y Florence va con el Sr. Rusty en busca de ayuda .

Los preparativos están en plena marcha para el Día Internacional del Caracol y Brian es el organizador de eventos, tiene mucho trabajo para la celebración de esa tarde . Sin embargo , Dougal tiene cosas más importantes en su mente - su pastel preciado se ha perdido. Y él no es el único que tiene algo perdido: a casi todo el mundo en el Jardín Encantado le falta una posesión favorita .