El libro peligroso para los chicos

A la familia McKenna le cuesta expresar lo que siente ante la pérdida de Patrick. El tío Terry, el hermano gemelo de Patrick, vuelve a presentarse en sus vidas. A los niños les dan El Libro Peligroso para los Chicos, y Wyatt tarda poco en verse partícipe de fantasías realistas inspiradas por el volumen. Wyatt deberá enfrentarse a una misión a la Luna y las emociones de su familia.

Beth tiene problemas con la cada vez peor economía familiar. Tiffany y el tío Terry intentan ayudarla... a su manera. Mientras tanto, Wyatt viaja desde el salvaje oeste hasta el campeonato mundial de póquer, y también aprende la importancia de saber cuándo ser sincero y cuándo tirarse un farol.

Como su madre y sus profesores están preocupados, a Wyatt lo mandan a una terapeuta, donde se enfrenta a la idea de que quizás esté loco. Mientras, Beth intenta a toda costa que la familia esté animada, y Liam se ve víctima de una maldición que lo trae de cabeza, para mayor deleite de Dash.

Los problemas financieros van a peor, y Beth intenta ganarse un dinero extra trabajando como conductora. Wyatt, que quiere ayudar, monta un puesto de limonada. Liam y Dash intervienen, cosa que enseguida acaba en una salvaje guerra de limonadas con otros niños rivales.

Después de que Wyatt fracase intentando hablar con la chica de quinto que le gusta, recurre a Patrick y al Libro Peligroso para conseguir ayuda sobre cómo hablar con las chicas. Por su parte, Dash y Terry intentan estrechar lazos con un videojuego, y Liam encuentra una ayuda inesperada para su trabajo de clase.

Beth echa de casa al tío Terry después de que, pese a sus buenas intenciones, su proyecto acabe haciendo estragos en la casa de los McKenna. Al tener un dormitorio destrozado y toda la familia discutiendo a su alrededor, Wyatt se pregunta si no estaría mejor solo.