Soundtrack #2

Hyeonseo renuncia a su sueño de ser pianista y dirige una academia de piano. Como tiene problemas para sacarla adelante, Hyeonseo trabaja como repartidora a media jornada y se prepara para abrir un restaurante de tteokbokki. Un día, se encuentra con una excompañera que le ofrece impartir clases particulares. Mientras tanto, Suho, director general del grupo creativo Playing, se desmaya cuando le pitan los oídos. Le diagnostican síndrome de adaptación general y decide tomar clases de piano durante el mes que esté recuperándose. Durante sus vacaciones, Suho descubre a K al buscar a un creador musical.

Suho acepta tomar las clases de piano para demostrar cuánto le ha cambiado la vida ahora que es un directivo de éxito, mientras que Hyeonseo decide darle clases por el dinero, lo que genera tensión entre los dos. Después de la clase, Suho queda con K, un creador musical, y le propone colaborar. K tiene que marcharse dentro de poco a EE. UU., pero decide quedarse y trabajar en casa de Suho. Mientras tanto, Hyeonseo conoce a K en su segundo trabajo y lo ayuda con los arreglos de piano de su canción.

K le pide a Hyeonseo que colabore con él en la canción. Hyeonseo duda sobre si volver a tocar, pero acepta colaborar en el proyecto, emocionada por las palabras de sinceridad de K. K, entusiasmado, se lo cuenta a Suho y dejar caer lo que siente por Hyeonseo. Suho, preocupado por la colaboración entre Hyeonseo y K, les propone que se alojen en su casa mientras trabajan en el proyecto. La primera noche, Hyeonseo sale a pasear y se encuentra con Suho. La conversación saca a la luz sentimientos del pasado que estaban ocultos.

La pregunta de Suho a Hyeonseo deriva en una conversación muy dolorosa y a los dos les cuesta dormir. Suho asusta a Hyeonseo cuando, al día siguiente, se desmaya por el tinnitus, lo que rompe la incómoda tensión que hay entre ellos. Suho, Hyeonseo, Changsik y Jingyeong se quedan hasta muy entrada la noche bebiendo en el MumuPocha, y Suho se ofrece a llevar a Hyeonseo a casa. Los dos, que no quieren que acabe ya la noche, se toman la última en casa de Hyeonseo. Suho, borracho, le confiesa lo que siente de verdad a Hyeonseo.

Al día siguiente, Suho y Hyeonseo se despiertan en la misma cama. K le confiesa a Hyeonseo lo que siente el día de la grabación y todos se juntan para tomar algo después del rodaje. Para decepción de Suho, Hyeonseo niega haber vuelto con él. K se marcha a EE. UU. después de completar el proyecto. Continúan las clases de piano después del proyecto y Suho le pregunta a Hyeonseo qué es él para ella.

Suho y Hyeonseo vuelven a estar juntos. Sin embargo, Suho agobia a Hyeonseo al intentar subsanar el pasado. Los dos deciden darse un tiempo después de una discusión y Hyeonseo se marcha a Santiago para encontrarse a sí misma.