Suga, líder del club motero Devil's Drifters, es liberado de prisión inesperadamente. Fuera se enfrenta a una dura realidad: en su ausencia, su hija Daisy ha muerto, su familia está destrozada y ha desaparecido un gran cargamento de droga. Mientras Suga intenta recuperar su lugar en el club, la desconfianza crece y el peligro acecha desde todas partes. ¿Podrá proteger a su club y su familia?

Suga ha sido declarado 'Bad Standing' por su propio club y busca nuevos aliados para recuperar la droga perdida. Mientras tanto, Lynn intenta reavivar el caso fallido contra Suga, mientras ella y su sobrina son atormentadas por un pasado en el que Suga juega un papel crucial. Marcel tendrá que demostrar su lealtad: ¿elegirá el club o a su familia?

Candy busca desesperadamente a su hija desaparecida, Melissa, mientras Suga sigue buscando la droga perdida. Cuando se unen para buscar a su hija, descubren un secreto impactante que pone patas arriba tanto su relación familiar como la dinámica del club. Mientras, la adicción de Lynn no solo la pone en gran peligro a ella, sino también a su sobrina Zoë.

Suga lucha contrarreloj para salvar a su hija, Melissa, pero encuentra al mismo tiempo una oportunidad para vengarse de Spike. Mientras tanto, Spike revela su colaboración secreta con un aliado inesperado y pone en marcha un arriesgado plan. Mientras la tensión crece, Candy toma cartas en el asunto y obliga a Suga y Spike a tener un enfrentamiento en el que la verdad saldrá a la luz.

Suga se embarca en una peligrosa misión para salvar a Melissa, pero antes debe retomar el control de su club y enfrentarse a sus antiguos enemigos. Los problemas de Lynn se agravan cuando su alianza secreta está a punto de desvelarse, obligándola a hacer un pacto con Suga para proteger a sus familias. Finalmente, todos los secretos y lealtades se ponen a prueba en un enfrentamiento mortal.