 
 Roz y Lil son unas amigas de toda la vida que viven en un lugar paradisiaco de la costa australiana. El esposo de Lil murió hace ya varios años y la pareja de Roz se acaba de mudar a Sydney por cuestiones de trabajo. La principal compañía de estas mujeres son sus respectivos hijos, dos jóvenes amantes del surf, Ian y Tom. "Son como dioses", dice una de ellas mientras los observan con cierto toque de deseo. Para su fortuna, los chicos también se sienten atraídos por la mamá del otro.