A principios de la década de los 2000, Vito Rizzuto es el jefe de la familia criminal Rizzuto y está en la cima de su influencia y poder, mientras mantiene el Ayuntamiento y la policía en su bolsillo.

Con Vito en prisión, Declan queda al mando. Sin embargo, Nico se proclama jefe de la familia. Nico provoca una sangrienta cadena de reacciones entre las bandas de Montreal cuando ordena el asesinato de dos hombres por no tomarlo en serio.

La familia se sienta con Nico y Declan; Nico acepta volver a su vida habitual en el sector inmobiliario. En un flashback ocho años antes, Declan es arrestado, recibe una sentencia de 15 años de prisión y promete no convertirse en informante.

Después de que la familia termina de enterrar a Nico Jr., Nicolo Rizzuto es asesinado a tiros por un francotirador, disparado a través del cristal de su casa mientras cuidaba sus plantas de tomate.

En la frontera entre Quebec y Vermont, los hombres de Sal tienden una emboscada a un punto de entrega de Rizzuto. Con la aprobación de Vito, Declan y Gio aumentan la tasa de homicidios de Montreal en un 250 por ciento.

Sal y un guardaespaldas se encuentran con Declan en su cabaña, donde Declan, sin sospechar nada, mata a su guardaespaldas. Mientras Sal intenta escapar, Declan lo mata a tiros.