Después de perder al hijo que esperaba, Inés descubre que su marido quiere divorciarse y quedarse con la custodia de su hija. Aislada en su casa decide suicidarse; cuando vuelve en sí, se da cuenta de que una persona la ha salvado: Hugo.

Hugo es enviado a un internado después de un altercado con su padre. Inés, para no alejarse de él, decide seducir a Tomás y convencerle de que saque a Hugo del internado. A ella no le importa cómo sea él, solo quiere estar cerca de Hugo.

Comienza una difícil etapa: Inés se tiene que acostar con el padre de Hugo. A Hugo, por su parte, se le hace intolerable que su padre acaricie a la mujer que él ama. Ainara atraída por Hugo, comienza a reclamar el derecho de poder ver a su madre.

Tomás descubre a Inés e hijo haciendo el amor y sufre un infarto. Hugo queda a cargo de su hermano y su mujer Ana. Necesitada de amor, lo busca en el rival político de Mauro. Inés, para no ser separada de Hugo, juega con esa información.

Al conocerse públicamente el adulterio de Ana, el matrimonio y la carrera política de Mauro llegan a su fin. La traición y el escándalo son demasiado para Mauro. Ainara y Hugo parecen encontrarse cada vez más a gusto juntos.

Mauro descubre el video de Inés y Hugo, y la amenaza con ir a la policía. Hugo acude a defenderla y en la pelea Mauro cae por el balcón. A la policía le dan la versión de que Mauro se ha suicidado. Inés tiene la patria potestad de Hugo.