La pequeña Estefanía cumple años y su abuelo, un hombre millonario, le organiza una fiesta impresionante. El padre de Estefanía, Octavio, cansado de las humillaciones de su suegro, tiene un macabro plan que involucra la desaparición de su hija.

Magdalena, la madre de Estefanía, regresa de Canadá para tratar de sanar el dolor por la desaparición de su hija y está dispuesta a todo con tal de encontrar al culpable. Una fiesta de cumpleaños se planea con entusiasmo.

Magdalena busca a un investigador privado y se encuentra con Leonardo, a quien le dice que ella sabe que Octavio es el responsable por la desaparición de su propia hija y ella lo uno que busca es justicia. Magdalena piensa cambiar muchas cosas.

Octavio le dice a Magdalena que el también ha sufrido la desaparición de su hija y que le ha dejado estragos físicos. Leonardo está muy interesado en el caso de la hija de Magdalena y comienza a trabajar. Dulce, ahijada de Magdalena, cumple años.

Magdalena enfrenta a Octavio y le dice que ella ya sabe que él secuestró a su propia hija. Octavio hace algo terrible en presencia de Jerónimo, Gertrudis y Abigail, todo el medio de la fiesta de cumpleaños de Dulce. Comienza un plan macabro.

Se da a conocer la noticia de la muerte de Magdalena y todos están consternados. Octavio fue quien la asesinó y ahora tratará de hacerlo ver todo como un accidente, con el apoyo de los testigos del asesinato que sufren por su complicidad.