
Después de pasar una década en Londres, Rona (Saoirse Ronan), de 29 años, vuelve a casa, a las Islas Orkney de Escocia. Está sobria pero se siente sola. Intenta reprimir los recuerdos de los eventos que la llevaron a la sobriedad. Lentamente, la mística tierra entra en su mundo interior y, día a día, Rona encuentra esperanza y fuerza en sí misma entre los fuertes vendavales y el frío mar.