Hortensia, un reino que existió por más de 700 años, es atacado sin preaviso por Camellia, uno de sus principados, obligando al joven Alfred Albert, heredero del Dominio de Albert, a crecer rápido y liderar a su gente en defensa del reino.

Los monstruos del folclore de Magonia se diseminaron, llevando a que un niño curioso termine perdido por querer ver al monstruo legendario de una cueva cercana. Pero cuando Alfred y los otros investigan la cueva, Marius tiene recuerdos desagradables.

Albert y Maurice son convocados a la capital para conocer al capitán de la Orden Eclesiástica, que les encarga liquidar a los muertos vivos de Aldea Petale, que fue aniquilada hace un tiempo por los efectos de una plaga letal.

El grupo va a la capital para permitirles a Alfred y Maurice reportar directamente al Capitán Georg. Sin embargo, de camino, recogen a unos jóvenes mellizos Dairean, aparentemente sobrevivientes de un ataque de monstruos, que le caen bien a Alfred.

Buscando aliados moderados en el reino, el Capitán Georg le pide a Alfred y el resto que busquen a Adelheid, heredera del Dominio de Olivier. Sin embargo, las tensiones escalan cuando Didier y los Caballeros Eclesiásticos arrestan a Adelheid.

Alfred y su séquito son enviados a la Isla Juin para investigar una afirmación de que la perdida Princesa Marielle está exiliada allí. La cuestión se complica cuando Thalia y Elva también llegan para determinar si la supuesta princesa es real.