Luego de ser reportado por mal comportamiento, Spot trata de demostrar qué tan malo puede ser. Luego de insultar a un cartero el día de orientación profesional, Leonard trata de cambiar el prejuicio de Spot.

Cuando la ciudad trata de convertir el parque para perros en una pista de skateboard, Spot tiene sentimientos encontrados.

Spot trata de averiguar si los perros tienen alguna tradición para las fiestas mientras la Sra. Helperman trata de escribir una obra de teatro escolar que incluya todas las tradiciones religiosas de los niños.

Mientras cuidan a Tallulah, la gata del director Strickler, Leonard y Spot tratan de asegurarse de que Tallulah no descubra el secreto de Spot.

Niño Bonito y el Sr. Jolly van a la escuela para pedirle ayuda a Leonard cuando cada uno piensa que el otro está perdido. Spot se toma demasiado en serio su rol como vigilante de seguridad.

Leonard se siente culpable luego de que una niña de preescolar le revela que está enamorada de él y le trae muestras de dulces de la tienda de su padre.

A Spot y Leonard les asignan tareas de servicio a la comunidad que no soportan.

Spot se burla del mal corte de cabello de Leonard hasta que un tratamiento de peluquería canina mal hecho amenaza con revelar la identidad falsa de Spot.

Cuando salen a pedir dulces, Spot convence a Leonard de cruzar la calle aunque Leonard le prometió a su madre que no lo haría.

Spot no puede decidir si ir a una exhibición aérea o cumplir con su tarea escolar de cuidar huevos de gallina.

Para ayudar a los alumnos a leer 2000 libros en un mes, Strickler designa a Spot como Vicedirector antivicio adjunto junior. Spot y Leonard venden chocolate para reunir dinero para un scooter.