Tras diez años encerrada en una prisión china, María logra escapar y liberarse. A partir de entonces, solo tiene un objetivo, el cual es volver a Madrid y vengarse de los que le hicieron daño: su familia. Pero antes, debe volver sobre los pasos de todo lo que la llevó a una prisión al otro lado del mundo. Todo comenzó en el año 2001, cuando María tenía 26 años y era una prometedora abogada. Descubrió que era adoptada y comenzó a buscar respuestas. ¿Dónde nació? ¿Por qué sus padres no le dijeron nada? ¿Quién es su madre? La investigación en la que se embarca la lleva a descubrir un negocio fraudulento de compra y venta de bebés en el convento El Remedio en los años 70. Su mundo perfecto comienza a desmoronarse cuando sospecha que sus padres también la compraron. Tras estos descubrimientos, empieza a creer que no conoce a su familia en absoluto, sobre todo, cuando ve a su padre agredir al portero del convento y cree que lo ha matado.

María entra en la cárcel china y es mal recibida por los prisioneros de un sector, que incluso la agreden. Solo su amistad con Irina, que enseguida la convierte en su favorita, la protege en un ambiente tan hostil. María se desahoga con Irina y le cuenta la vida que tuvo con su familia en Madrid unos años antes, no sin antes jurar vengarse, ya que los considera culpables de su cautiverio. María, totalmente perpleja por toda la información que está descubriendo sobre su familia biológica, adivina, con la ayuda de Pablo, que su propio padre, Francisco, podría estar detrás de la repentina muerte del portero del convento El Remedio. El regreso de su hermano Bruno de Nueva York, tras sobrevivir al atentado de las Torres Gemelas, aviva a toda la familia. Pero nadie puede sospechar las verdaderas intenciones que Bruno tiene con María. Por casualidad, María conoce a Juan, un abogado especializado en bebés robados, y la atracción entre ambos es inmediata, impulsando aún más la búsqueda de María de su madre biológica. Juan es atropellado para robarle unos importantes documentos sobre los bebés robados, mientras María encuentra a su verdadera madre, Fernanda, cuya injusta historia la convence de llevar el caso a los tribunales.

María se endurece en la cárcel china, sobre todo después de que una violenta pelea con una reclusa la pone en régimen de aislamiento durante unas semanas. Solo el recuerdo de lo ocurrido en Madrid años antes la mantiene con fuerzas para luchar por su vida e idear lo que será su futura venganza. Tras varias charlas con Fernanda y Trini, una amiga suya, María retoma la historia de su nacimiento en el convento El Remedio. Allí, Fernanda dio a luz a dos hijas gemelas, María y Amparo, pero Trini, endeudada con el convento, se vio obligada a traicionar a Fernanda y dar a una de las niñas en adopción a una familia rica, mientras que Amparo se quedó con su madre. A medida que María va conociendo más sobre su nacimiento, su madre Luisa intenta tapar el pasado cueste lo que cueste, recurriendo incluso a sobornos. Su padre, Francisco, también intenta tapar lo sucedido, pidiéndole ayuda a Enrique, sin saber que es uno de los responsables del negocio de los bebés robados. Juan, recuperado del atropello, acompañará a María durante todo este proceso, en el que su conexión será fundamental para que ella quiera llegar hasta el final.

China, 2013. María se convierte en trabajadora sexual para conseguir medicinas para su amiga Irina, pero no puede salvar su vida. Lo que sí consigue es escapar de la cárcel y construir una nueva vida con el dinero que le dejó su amiga. Tras regresar a España, María está decidida a vengarse de los responsables de su cautiverio. Madrid, 2001. María desiste de su idea de demandar a su padre, sin saber que esta decisión la alejará de Juan en un momento en el que este necesitará todo su apoyo. Mientras tanto, Fernanda, ingresada en el hospital, se recupera de una intoxicación etílica y Amparo llega a Madrid con la intención de aprovecharse de su nueva hermana María. Para ello, Amparo se mete en su casa, en su familia y en su vida, siguiendo un detallado plan ideado por Curro para pagar sus deudas. Pero Amparo logra deshacerse de Curro, para poder vivir a su manera y, cueste lo que cueste, la vida de María. Esta no sabe que su enemigo duerme bajo su techo.

Madrid, 2013: María, bajo su identidad de Mercedes Dantés, mantiene vigilados a Luisa y a su tío Enrique como parte de su venganza y, a través de textos anónimos, intimida a su tío hasta volverlo loco. Su plan para desestabilizar a sus enemigos ha comenzado. Madrid, 2001: Amparo vuelve a su pueblo después de vivir el sueño en Madrid y el contraste con su vida real es insoportable. No le gusta su vida ni ver a Fernanda borracha, pero para colmo deben seis meses de alquiler que Amparo no sabe cómo pagar. ¿Estará tentada a convertirse en una trabajadora sexual, como su madre? Mientras tanto, María y Juan encuentran el caso de Roberto y su hijo biológico. María, tras darse cuenta de que es el chico que vino con Bruno desde Nueva York y adivinar el vínculo con su familia, comienza a investigarlos. Pablo consigue imágenes del atropello de Juan que incriminan a Roberto. ¿Qué está pasando? ¿Quién es Roberto? ¿Qué lo relaciona con la familia Fuentes-Vergel? María y Juan pactan con Roberto, acordando no demandarlo si les entrega los documentos del convento que tiene. Enrique también va detrás de esos documentos. Sin embargo, Roberto ha planeado un golpe a la familia que nadie espera.

Madrid, 2013: María, bajo su identidad de Mercedes Dantés, sigue investigando a su familia para descubrir cómo han rehecho su vida con tanta facilidad en su ausencia. Esto alimenta su rabia y la empuja a entrenar más su cuerpo, así como su habilidad con las armas. El día de su venganza se acerca. Madrid, 2001: María y Juan esperan que Roberto traiga los documentos del convento que revelan el negocio de los bebés robados, pero Roberto es atropellado antes de su encuentro y los documentos desaparecen. María y Juan, pero también Alfredo Palomar, instigados por Enrique, tienen que encontrar dónde están escondidos los documentos. ¿Quién los conseguirá primero? Si caen en manos de Enrique, todo habrá sido en vano. María, desesperada, desconfía de su familia y busca consuelo en Juan. Pero ¿podrá María confiar realmente en él? Mientras tanto, Luisa quiere recuperar a María y organiza una fiesta familiar, invitando incluso a su abuela. Pero la fiesta no sale como esperaba, ya que María ataca a su familia adoptiva mientras que haría cualquier cosa por Fernanda, incluso pagar una carísima clínica de rehabilitación.