Caroline Rhea

Max y Caroline han de recuperar el vestido de boda de Sophie y llevarlo a salvo a la iglesia a tiempo para la gran boda.

La inspectora del hotel Tipton se presenta y Moseby teme que con Zack y Cody viviendo allí, algo acabe surgiendo mal. Por eso los soborna para que se vayan del hotel con entradas para ver un partido de béisbol de los Red Sox. Sin embargo, Zack decide llevarse a sus mascotas, dos ratas, con ellos. Por desgracia para Moseby, el vuelo de la inspectora se retrasa y se presenta justo cuando Zack y Cody llegan del partido. Las ratas se escapan y todos entran en pánico, por lo que el señor Moseby pierde su trabajo.

Ilsa, la inspectora del hotel, vuelve a aparecer, pero ahora está casada y dirige el hotel de enfrente... Y por si esto fuera poco, London se enamora de Todd, el hijo del dueño del St. Mark. A Todd no le interesan los hoteles, él quiere ser dentista: y London tiene los dientes perfectos. Mientras tanto, a Cody le da por hacer galletas y resulta que a los huéspedes les encantan. Zack sueña con ganar una fortuna, pero Cody se cansa cuando Moseby le hace un pedido de 500 galletas para el baile de Beacon Hill.

Moseby desafía al personal del St. Mark, el hotel rival del Tipton, a una competición de bolos, después de que el equipo de Ilsa derrote al Tipton al fútbol bandera, una modalidad de fútbol americano. Moseby confía en que Zack, quien juega muy bien a los bolos, tome el mando. Pero por desgracia Zack se ha metido en un lío y, después de hacerle una jugarreta a Cody, acaba castigado y le prohíben jugar en el equipo. Con la promesa de un beso de Carey, Cody consigue convencer a Arwin (quien fue jugador profesional de bolos en su día) para que reemplace a Zack y resuelva la papeleta.

En el mejor penúltimo episodio de LOL Canadá: los comediantes se enfrentan a un fantasma y empiezan a cuestionarse todo. El programa obtiene un rap malo, molestan a Hamlet y Jay establece un punto de inflexión que les cambia por completo el juego a los cuatro últimos.