La familia Miklósi tiene un envidiable estilo de vida muy acomodado, garantizado por las actividades ilegales del padre, pero al final de un duro día el cabeza de familia decide ir por el buen camino.

Mira se rebela contra el estilo de vida de sus padres. Attila quiere cambiar, pero ante las expectativas de Janka, parece algo inútil. Una fortuna en dinero robado termina en manos de Márk, que comienza a gastar dinero como si no hubiera un mañana.

Attila está satisfecho con su nueva vida, pero Janka no puede vivir sin sus lujos habituales. Mira empieza a trabajar por las noches y el ritmo de vida nocturno la absorbe. La cita de Márk casi termina en tragedia.

Attila pierde todo su dinero y vuelve a delinquir, por lo que Janka le dará una última oportunidad a su relación. Márk está con la soga al cuello. Mira disfruta de su libertad, pero de repente su “nueva familia” le da un shock.

Mira acaba en desintoxicación y hace una nueva amiga. Márk le confiesa su robo a Hollós. Attila se da cuenta de que le han estafado con el cargamento de contrabando; su enorme deuda sale a la luz. Janka planea empezar de nuevo con otro hombre.

Márk pierde el norte y lo expulsan del colegio. Mira se venga de su ex jefe. Attila descubre que su mejor amigo puso la vida de su hijo en peligro y encuentra la oportunidad de vengarse. Janka se muda con su amante.