Quienes tienen la habilidad de ver el futuro se enamoran. Los oráculos místicos y encantadores de la Generación Z se reúnen para encontrar a sus amores. Aunque el amor es la única cosa que no pueden predecir, ¿se dejarán llevar por el destino inevitable? ¿O verán a dónde los llevan sus instintos? En este hilo del destino sus relaciones románticas se entrelazan y hay una maraña de emociones sin definir. Es un caos que alimenta el corazón, pero los romances son intensos y drásticos. Ni siquiera los dioses podrán anticipar los arriesgados coqueteos que habrá entre ellos. El peculiar romance de los adivinos comienza de nuevo, ¿a dónde llegarán sus corazones?