Después de sobrevivir a un grave accidente de autobús, un aturdido House lucha por recuperar la memoria para salvar la vida de uno de los pasajeros, que ya presentaba síntomas de una enfermedad mortal antes del choque.
Morgan busca a Al, solo para descubrir que no es el único que la busca… y que su búsqueda puede haberle puesto una diana en la espalda.
Todos luchan desesperadamente por vivir la destrucción venidera en sus propios términos.
En una carrera contrarreloj para detener el plan de Teddy, se revelan los motivos y se ponen a prueba las convicciones, mientras Morgan y sus aliados se infiltran y se abren paso a través del submarino varado que contiene las herramientas para la destrucción de Teddy.
House está convencido de que un actor de su telenovela favorita está gravemente enfermo después de observar sus síntomas por televisión. Decide intervenir y tomar la iniciativa, pero tanto su equipo como el actor descartan su evaluación.