Hola, Papi

El hermano de Ben, Danny, se muda con él y su compañero de cuarto, Tucker. Ben se sorprende al saber que es padre cuando dejan a una bebé en su puerta. La amiga de la escuela de Ben y Danny, Riley, regresa después de ser admitida en la escuela de leyes.

Ben y los chicos intentan crear un programa de cuidado de niños a prueba de tontos, pero la falta de comunicación y otras prioridades hacen que su plan se desmorone. Los chicos se están adaptando a sus nuevas responsabilidades de cuidar a Emma y no es tan fácil como pensaron. Ben se le ocurre un horario de cuidado de niños a prueba de tontos, pero después de una serie de fallas de comunicación, su plan se desmorona. Las prioridades de Ben no están del todo bien cuando opta por salir en una cita con una chica y luego quedarse en casa, pero solo puede pensar es en su pequeña. Mientras tanto, Bonnie teme que los muchachos no puedan manejar la responsabilidad y se va a ayudarlos, pero Riley intenta convencerla de que les dé una oportunidad.

Ben lleva a Emma a una cita médica y coquetea con la enfermera mientras Tucker, sin saberlo, lava el jersey de la suerte de Danny. Ben y Tucker llevan a la bebé Emma a su primera cita con el médico, y Ben termina invitando a la enfermera Cassie a una cita. Riley se pone celosa de la nueva relación de Ben con Cassie, pero trata de hacerse amiga de ella por petición de Ben. Mientras tanto, Danny tiene su primer juego de hockey con los Rangers de Nueva York y es muy supersticioso: usa una camiseta vieja de la escuela secundaria que nunca ha sido lavada en todos los partidos y Bonnie atiende todos sus rituales. Tucker, en un esfuerzo por limpiar el apartamento, lava la camiseta de Danny por accidente y se reduce a un desastre hecho jirones: Danny queda devastado. En el juego, Riley y Cassie entran en una pelea de chicas, que aparece en la pantalla.

Los muchachos aprecian toda la ayuda de Bonnie, pero ella está empezando a ser demasiado abrumadora para ellos, apareciendo inesperadamente en el departamento a toda hora. Ben ansiaba estar con Emma cuando no está trabajando, pero con Bonnie siempre saltando para cuidarla, está empezando a extrañar la hora de su padre e hija. Mientras tanto, Riley tiene un nuevo compañero de estudio, Jack, de quien Danny parece estar celoso, pero Ben la alienta a salir con él. Los chicos intentan esconderse de Bonnie yendo a la casa de Riley, que termina saboteando su cita.

Ben se entera de que hay una vacante como administrador en el bar, solicita la ayuda de Riley para demostrarle al propietario, Henderson, que es lo suficientemente responsable para el trabajo. Tucker y Danny intercambian el cochecito súper femenino que Bonnie compró por uno mucho más genial, uno que parece ser un imán para las chicas.

Ben y Tucker están en una divertida liga de softbol, pero siempre pierden. Tucker está cansado de perder y cuando Riley aprovecha la oportunidad de intervenir y ayudar, él se emociona hasta que su lado competitivo sale y ella lleva al equipo al límite. La pequeña Emma está luchando con la comida y sigue escupiendo o salpicándole comida a todo el mundo. Por otro lado, Danny se molesta al descubrir que Bonnie está saliendo con su entrenador, Hank (Tuc Watkins).