Los vampiros de todo el país "salen del ataúd" tras la invención de una sangre sintética. En Luisiana, Sookie Stackhouse, una camarera con telepatía, se siente atraída por un vampiro de 173 años, Bill Compton, cuya mente no puede leer.

Bill le devuelve el favor a Sookie al salvarla de la venganza de los Rattray: cura a la camarera herida con su sangre y la deja con los sentidos agudizados. Bill y Sookie dan un paseo nocturno.

Tras un intento frustrado de "glamurizar" a Sookie, Malcolm, Liam y Diane se retiran rápidamente cuando Bill la defiende. Sam busca aliviar a corto plazo su soledad, y Tara busca un respiro de la ira de su madre, provocada por el alcohol.

Jason vuelve a prisión preventiva con los agentes Andy y Bud. Tara le saca de la cárcel, pero ni ella ni Lafayette tienen el antídoto. La abuela le pide a Sookie que use su telepatía para descubrir al asesino y exculpar a su hermano.

Bill se gana a todo el público de la misa de Adele con sus vívidos recuerdos de la Guerra Civil, aunque Andy y Bud siguen sospechando. Sam intenta aprovechar su oportunidad con Sookie, aunque claramente no está lista para comprometerse.

Sookie quiere aislarse de la cacofonía de voces internas de sus amigos y vecinos. Tras gritar a su hermana y tumbar a Andy de un golpe, Jason lucha contra el síndrome de abstinencia del zumo V. Tara se resiste ante la propuesta de su madre.